sábado, 1 de marzo de 2014

Ensueño

Ingreso paulatinamente a un sueño de siesta, comprendo que lo estoy haciendo... camino lerdamente, con entusiasmo pero lerda, como si algo me intentara indicar que no continúe. 

Me encuentro al pie de una escalera, sin escalones, una especie de rampa cubierta con un vidrio que se horneó de más, sus extremos curvos y transparentes me conquistan... entro, voy sobre lo cristalino y comienzo a ver escaleras que van y vienen, puertas que abren y cierran, decido tomar una dirección nueva... aparezco en una escena donde todo, absolutamente todo es color sepia, comprendo que estoy en un sueño donde puedo hacer lo que más desee, delante de mi aparece una "Santa Rita", hermosa, despabilante, inmediatamente decido darle su color original... un fucsia vivo encandila mis ojos...
Todo tiene su oportunidad de ser diferente, yo se la doy.
Escucho un ruido que me desconcierta ... salgo. 
Ahora camino por un sendero de tierra, la tarde cae y el viento hace danzar los pastos largos que me recuerdan la escena anterior, con su tono ocre y mi certeza de poder modificar y re-crear ... la vida; voy, avanzo, me dirijo hacia un punto pactado, quizá. Delante mío, muy lejos, están los sureños, ese par de hermanos que la vida me dio, quiero alcanzarlos, tengo para decirles y quiero que me digan, corro y voy, sigo... sé que voy a llegar.




Desde una casi infancia, hacia una vida compartida.